EL SUCESOR DEL FÜHRER
El Almirante Karl Doenitz, en su nueva
calidad de Jefe da todas las Fuerzas Armadas alemanas, ha dirigido una orden del día a los combatientes donde dice:
“Camaradas de la Wehrmacht alemana: El Führer ha caído. Fiel a su gran
idea de salvar a los Pueblos europeos del Bolcheviquismo,
ha ofrendado su vida y ha muerto como un héroe. Con él ha desaparecido uno
de los más grandes héroes de la
historia alemana. Con orgullo, reverencia y sentimiento inclinamos nuestras banderas.
El Führer me ha nombrado su
sucesor, como Jefe del Estado y como Comandante supremo de todas las unidades
armadas alemanas. Me hago cargo del mando supremo de todas las unidades, con la
determinación de continuar la lucha contra el Bolcheviquismo hasta que nuestras
tropas y los cientos de miles de familias de los territorios alemanes del Este sean rescatadas del enemigo y del
exterminio.
Continuaremos combatiendo
contra los ingleses y norteamericanos
en tanto me impidan llevar a cabo la lucha contra los Soviets. La situación
exige de todos ustedes, que han
asistido ya a tan grandes acontecimientos históricos, que sigan resistiendo
sin vacilación. Les pido disciplina y
obediencia. El caos y la ruina
sólo pueden ser evitados cumpliendo mis órdenes sin reserva. Todo aquel que en
estos instantes deje de cumplir con su deber será un cobarde y un traidor, ya que
atraerá la muerte y la esclavitud
sobre las mujeres y los niños alemanes.
El juramento de fidelidad que hicieron ante el Führer es validó también ante mí, que soy el sucesor
que él nombró, sin que haga falta ninguna otra formalidad.
Soldados alemanes: Cumplan con su deber. La vida de nuestro Pueblo está
en peligro.”
Agencia "EFE"; 01 de mayo de 1945.
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