El Señor Alfred Hugenberg, Ministro de Economía y
Agricultura, pronunció en el Palacio de los Deportes, que estaba engalanado con
los colores del antiguo régimen, un discurso, en el que definió los fines de su
Partido y los motivos que ha tenido para unirse a los Racistas, para dirigir
los destinos del Reich. Asistieron al acto el ex ‘Kronprinz’ y su esposa, el Vicecanciller
Franz von Papen, el Ministro de Trabajo Franz Seldte y otras personalidades.
Declaró Hugenberg:
“El Mariscal Paul von Hindenburg, que ya durante la
guerra había rechazado a los enemigos de Alemania, había salvado una vez más al
país de las disensiones que le arruinaban, al lograr concertar entre las
fuerzas nacionalistas divididas una alianza en la que cada uno se asigna un fin
determinado.
El Partido Nacional Alemán a pesar de su hostilidad creciente
contra el Parlamentarismo había aceptado celebrar nuevas elecciones y esto era
más bien para no comprometer la reagrupación de las fuerzas del Harzburg.
Soy partidario de una política económica firme y uniforme
y proclamo el deseo que tenemos los Nacionales Alemanes de servir a una patria
que quede libre de la esclavitud y del Parlamentarismo”.
Franz von Papen hizo después uso de la palabra:
“Aplaudo la unión que ha sellado el Presidente del Reich,
logrando la constitución del Frente negro, blanco y rojo entre los Cascos de
Acero, los Racistas y un cierto número de Conservadores.
Invito a los Católicos y Protestantes a colaborar en la
restauración del espíritu nacional y en la labor de dar estabilidad al régimen
Cristiano-Social, basado en la justicia y en la autoridad.
Reconozco los sacrificios que ha hecho el Jefe del mayor
Partido alemán. El movimiento popular formado por él asegura al Gobierno una
base sólida.
Me pronuncio contra el Colectivismo, incapaz de ayudar al
resurgimiento de la vida alemana y hablo a favor de la sumisión del Individualismo
al interés general”.
Habló después el Señor Franz Seldte, Ministro del Trabajo:
“La libertad interior y exterior, la situación militar
del Reich, la educación cívica de la juventud y la igualdad de derechos, son ideas
a las que los Cascos de Acero han otorgado su adhesión desde hace quince años
que comienzan ahora a realizarse y que encuentran su expresión en el nuevo
Gobierno”.
La sesión terminó en medio de grandes aclamaciones y la
muchedumbre entonó el antiguo Himno Monárquico Alemán.
Agencia “Fabra”; Berlín, 13 de febrero de 1933.
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